lunes, 7 de diciembre de 2015

Oye ¿y qué es un nombre científico?

Recién vi una imagen en Facebook que decía una mentira, decía que en México sólo había una especie de marsupial y era el tlacuache. En la foto ponían tlacuaches norteños (Didelphis virginiana), pero yo sabía que habían unos cuantos más. Busqué la información y supe que habían ocho especies distintas de tlacuaches en México: Didelphis virginiana, Didelphis marsupialis, Chironectes minimus, Philander opossum, Caluromys derbianus, Metachirus nudicaudatus, Marmosa mexicana y Tlacuatzin canescens. Entonces publiqué esta imagen que tuvo excelente recepción:


La caja de comentarios se llenó de tope y traté de dar respuesta a casi todas las preguntas, bloqueé trolls (como ya es costumbre) y también corregí nociones erróneas que se hacían populares por "likes" (já, como si la verdad fuera democrática). Una de esas nociones erróneas que noté era muy común era pensar que "tlacuache" (la primer parte del nombre común de estos bichos) era su nombre científico. Pronto hice esta respuesta:

Lo que trato de hacer ver es que "tlacuache" y "oso" no son el nombre científico, es más, ni siquiera son el nombre común completo, son parte de éste. Acabo de tocar dos conceptos que me gustaría clarificar.

1) Nombre común: el nombre que se le da de forma regional a una especie. Este nombre está en el idioma local de la región donde se usa y puede ser similar a otros nombres comunes dentro o fuera de la región a tratar. Ejemplo:

Este magnífico gato es conocido bajo el nombre común de "tigre". Foto de Agadez.

Al jaguar también se lo conoce como "tigre" y creo que nos queda claro que no es de la misma especie que el de la foto de arriba ¿cierto?. Foto de Chucao.

2) Nombre científico: binomio inseparable utilizado por los científicos y otros para comunicar el nombre de la especie a tratar sin importar el idioma. El nombre científico consta de dos partes, el nombre de género y el epíteto específico. Para saber cómo se deben escribir adecuadamente haz clic en este enlace de una entrada anterior del blog.

Como vemos, aunque a estos dos les dicen tigres diferentes grupos de personas, los nombres científicos son diferentes y por lo tanto, son distintas especies.

Y ¿trataré el tema del concepto de especie? No, de eso no trata este post (de forma breve diré que una especie es una entidad evolutiva independiente de otras que cumple con ciertas condiciones (reproductivas, anatómicas, conductuales, etc.) que las unifican como tales y las distinguen de otras)... En el futuro lo trataré a fondo, pero por ahora quiero que se entienda que el nombre común no es el nombre de la especie. Son cosas distintas. La utilidad del nombre común es que es fácil de usar por las personas que no tienen interés en la ciencia o formación en ella. No está mal que un indígena de la sierra de Oaxaca le diga "tigre" a un jaguar (Panthera onca) porque es su uso común. Lo que está mal es que pensemos que "tigre" es el nombre de la especie, porque no lo es.

Panthera tigris y Panthera onca compartieron un ancestro común hace unos 3.8 millones de años, son linajes distintos y especies diferentes. Y esas diferencias son bastante notorias en esta foto de kaytronika.

¿Y para qué molestarme en usar el nombre de la especie? Pues porque así no se homogenizan cosas que no son homogenizables. Así en vez de pensar erróneamente que sólo hay una especie de tlacuache mexicano, podremos ver que son ocho y que tres de ellos merecen protección porque están en situación de riesgo (no por nada están contemplados en la ley como especies amenazadas [Caluromys derbianus y Metachirus nudicaudatus] y en peligro de extinción [Chironectes minimus]). El identificar diferentes especies nos permite saber qué tan rica es la vida en la tierra, nos da sentido de identidad, nos alienta a conservar las distintas formas de vida y nos aporta información que sería imposible de obtener si consideramos todo como "más de lo mismo". Esa apatía debe cambiar porque ella es en parte la responsable de la crisis actual de biodiversidad.

Pensamientos como estos son los que nos llevan a no valorar la vida silvestre. Cuidado. Foto de Erik Patel. ¿Dejaríamos a la extinción al oso panda sólo porque "es otro oso, es la misma especie que los demás, todos son osos"?

Espero que el tema haya sido de tu interés. Si es así, no dudes en compartirlo en tus redes sociales (abajo vienen los botones para hacerlo). Gracias por leer.

jueves, 3 de diciembre de 2015

Las aves son dinosaurios

Seguramente si eres paleofriki tendrás una cara similar a esta:

No me digas...

Sin embargo, no a todos les parece tan obvio que las aves son dinosaurios. Y es que los divulgadores no hemos hecho un esfuerzo lo suficientemente poderoso para dejar bien claro por qué un ave es un dinosaurio. Y me he dado cuenta de esto platicando con amigos que no son paleofrikis (o no tanto).

Publiqué un video de un colibrí y dije que eran dinosaurios, el buen Chris me dijo esto. Y le respondí de forma muy simplona: "porque lo son". Si, ¿pero por qué?

Es un hecho comprobado que las aves son dinosaurios, pero ¿por qué? La respuesta es simple y de dos vías 1) tienen características anatómicas (sinapomorfías) que las agrupan entre los dinosaurios (razones anatómicas) y 2) están insertas en el árbol familiar de los dinosaurios (razones filogenéticas), cuando se hacen análisis de relaciones de parentesco, las aves son "una rama más" del árbol de los dinosaurios.

Relaciones de parentesco hasta hoy de los dinosaurios carnívoros avanzados y las aves. Como pueden ver, las aves son parte de este árbol y si sabes leer un cladograma, te darás cuenta que en la triada "Troodontidae + Dromaeosauridae + Avialae" no hay un grupo privilegiado y cualquiera puede ser el más avanzado. Siluetas de Phylopic, ((CC) Scott Hartman, Gareth Monger, Craig Dylke, Funkmonk, Brad McFeeters, T. Michael Keesey, Emily Willoughby y Andrew Butko.

Pero ¿le puedo dar nombre especial a esa rama no? Desde luego, el nombre es Avialae (o Neornithes si eres estricto y no consideras a Ichthyornis o Archaeopteryx como ave), pero eso no hace que se le "caiga" lo demás de herencia. Por ejemplo, los murciélagos son parte del árbol familiar de los mamíferos y su rama tiene nombre (Chiroptera) pero eso no los "descalifica" de ser mamíferos. ¿Entonces por qué a las aves les hacemos eso? ¿Por qué las "desconocemos" como dinosaurios?

Feos y todo, pero los murciélagos no dejan de ser mamíferos. Con las aves pasa algo inverso, por ser bonitas y únicas ahora son consideradas independientes de todo, pero no, son dinosaurios volantes. Ilustración de Ernst Haeckel.

Lo que sucede es que hoy sólo las aves tienen características únicas y especiales que las hacen completamente distintas de otros vertebrados: tienen plumas, son de sangre caliente (homeotermas), tienen pico, tienen alas, tienen huesos huecos con trabéculas, tienen un sistema de sacos aéreos derivados del sistema respiratorio y más... Pensamos pues que son únicas y especiales, pero casi todo lo que consideramos aviano, lo inventaron los dinosaurios no avianos primero.

Oye pero que avestruces más raras... Espera, esas no son avestruces, ¡son Struthiomimus! Arte por Tom Björklund.

Imagina por un momento que todos los mamíferos se extinguen, que somos paleontólogos alienígenas que visitan la tierra en unos cuantos millones de años. En esta tierra futura sólo queda un linaje de mamíferos vivo: los murciélagos. Además de ello, recién se está empezando a descubrir el hecho de que muchos mamíferos (si no es que todos) tenían pelo. Y unos cuantos "dementes" están diciendo que los murciélagos SON mamíferos. Todos los paleobullies del futuro se reirán de ellos y soltarán argumentos como:

"Eso es tonto, los murciélagos son murciélagos y no mamíferos" - Quiropterólogo alien del futuro.

"los murciélagos son únicos, está claro que descienden de cocodrilos y no tienen nada que ver con los mamíferos" - Feduccia alien.

"Yo no creo que los mamíferos hayan tenido pelo, creo que eran escamosos como todos los otros vertebrados de su época" - Niño rata alien del futuro que vio Oligocene Park.

"Ok, los murciélagos descienden de mamíferos, pero NO SON mamíferos" - Alien confundido con cómo funciona la filogenia.

¿Suena familiar? Ahora reemplaza "murciélagos" con "aves" y "mamíferos" con "dinosaurios". Eso es lo que les pasa a las aves, simplemente aventamos por la ventana su legado y las despojamos de toda herencia evolutiva, hasta pareciera que salen "de la nada", como si fueran creadas. Y no, las aves evolucionaron de dinosaurios y son dinosaurios. Del mismo modo que nosotros evolucionamos de primates y somos primates, que una ballena evolucionó de un mamífero y son mamíferos y así sucesivamente.

Por más distintos que puedan ser, todos estos grupos no dejan de ser mamíferos y tampoco las aves dejan de ser dinosaurios. Imagen tomada de Wikimedia Commons (clic aquí para ver al autor de cada foto).

Entonces, los dinosaurios no perecieron hace 66 millones de años. Una rama de su extenso árbol familiar sobrevivió y hoy surca los cielos en una enorme variedad de formas y tamaños. Los dinosaurios siguen con nosotros y los vemos casi todos los días. Disfruta y protege a los dinosaurios modernos, un vestigio vibrante de tiempos remotos.


martes, 1 de diciembre de 2015

PALEOFICHA: Exellia spp.

Nombre común: No tiene, podemos entonces castellanizar el nombre del género como "exelia" o podemos usar el nombre del personaje al que se dedica el pez y llamarle "pez de Exell).

Especies reconocidas: Exellia velifer (especie tipo) y E. proxima.

Significado del género: Es en honor a Arthur Wallis Exell, botánico y asistente del departamento de Botánica del Museo Británico de Historia Natural en 1901.

Género descrito por: Fue figurado originalmente por G. S. Volta en su obra de 1796 "Ittiolitologia Veronese", pero no le dio nombre formal. Fue Louis Agassiz quién le dio nombre por primera vez, cuando en 1835 hizo una revisión del trabajo de Volta, le puso a la especie "Semiophorus velifer" (y añadió una segunda: "S. velicans"). Posteriormente, White y Moy-Thomas en 1941 renombraron el género considerando la descripción de Agassiz como desnuda y acuñaron el nombre de Exellia.

Grupo taxonómico: Se trata de peces osteíctios del orden Perciformes y del suborden Acanthuroidei. La posición de familia es discutida, pues se piensa o que pertenece a la actual familia Ephippidae (palaguas o peluqueros) o bien, que tenía familia propia: Exellidae.

Foto del Museo Nacional de Historia Natural de París.

Rango temporal: Del Paleoceno al Eoceno.

Encontrado en: Italia (E. velifer) y Turkmenistán (E. proxima).

Conocidos a partir de: Múltiples esqueletos completos y en excelente estado de preservación, se conocen varias etapas del desarollo.

Ilustración de los posibles estados de desarrollo de Exellia velifer tomando en cuenta a sus parientes más próximos y la escala de los animales mostrados. Bajo guía científica de un servidor y de Ulises de la Paz Ruíz. Ilustración de Oscar Calva.

Reconstrucción en vida de Exellia velifer (la especie tipo) a partir de el adulto más grande que encontramos y que era seguro de esta especie. ¿No muy grande verdad? Reconstrucción de Oscar Calva asesorada por un servidor.

Curiosidades: Exellia pertenece a un grupo de peces que de nombre no te sonarán ni un poco (Acanthuroidei), pero seguro que si los conoces; si viste "Buscando a Nemo" debes de saber que es pariente de Gill (el líder del acuario de escapistas), de Burbujas (el pez amarillo un poco transtornado) y de la adorable Dory (no, Disney no nos paga un peso... patrocíname Disney, ah espera, luego de The Good Dinosaur, no quiero nada contigo, me has traicionado *huye llorando*)... Ejem, en fin. Otra cosa curiosísima es que este pececillo tiene un homónimo (otro género que se escribe y pronuncia igual), pero no se trata de un animal (el Código Internacional de Nomenclatura Zoológica prohíbe que dos animales lleven el mismo nombre), sino de una planta: una liana llamada Exellia scamnopetala ("de pétalos trepadores"), pueden ver la liana haciendo clic aquí. Exellia era un pez bastante menudo pero que llama bastante la atención por su aleta gigante (en relación a su cuerpo), poco se sabe de sus hábitos vida y otras cuestiones, es por estos misterios que se ganó su lugar entre las paleofichas.

Descripción original: *Ver la sección de "género descrito por".

PALEOFICHAS ANTERIORES:

1. - Tyrannosaurus rex.
2. - Diplodocus spp.
3. - Lystrosaurus spp.
4. - Protorosaurus speneri.
5. Paraceratherium spp.
6. Cryolophosaurus ellioti.
7. Huehuecanauhtlus tiquichensis.
8. Thectardis avalonensis.
9. Diplomystus spp.
10. Sebecus icaeorhinus.
11. Gastornis spp.


Literatura consultada:

Volta, G. S. (1796). Ittiolitologia veronese del museo Bozziano ora annesso a quello del conte Giovambattista Gazola e di altri gabinetti di fossili veronesi, con la versione latina. Giuliari.

Agassiz, L. (1835). Revue critique des poissons fossiles figurés dans l'Ittiolitologia veronese. Impr. Petitpierre et Prince.

White, E. I., & Moy-Thomas, J. A. (1941). XXV.—Notes on the nomenclature of fossil fishes.—Part III. Homonyms MZ. The Annals and Magazine of Natural History, 7(40), 395-400.

Bannikov, A. F. (2000). New data on Late Paleocene marine percoids (Perciformes) of Turkmenistan. Journal of Ichthyology, 40(8), 564-570.


jueves, 26 de noviembre de 2015

Tres cosas que no sabías del origen de los reptiles

Hola que tal estimados lectores. En esta ocasión les traigo una nueva sección: "Palaeos a la carta", en donde responderemos los comentarios más votados en nuestra página de Paleontología de vertebrados. Ahora presentaré el comentario ganador:

Gustavo Melim Gomes nos dice: "La transición de los anfibios a los reptiles, se sabe muy poco. Todo el mundo habla de la transformación de los dinosaurios a las aves."

Cierto, más que cierto... Los paleofrikis nos obsesionamos con los dinosaurios y olvidamos que hay otros grupos como los súper conocidos reptiles. Así que damos paso al tema: Tres cosas que no sabías del origen de los reptiles.

Número 1 . ¿Reptil?

Las entidades que conocemos como reptiles en realidad son fruto de nuestra selección bastante tramposa de un grupo particular de vertebrados. Selección en la que elegimos a unos, pero a otros no. Desde un punto de vista fisiológico, un reptil es un tetrápodo (bicho de cuatro patitas) escamoso. Pero desde un punto de vista filogenético, "reptil" es una palabra vacía que no significa prácticamente nada dado que excluimos a ciertos miembros de un mismo árbol familiar como reptiles, pero a otros no.

Lo que reconocemos claramente como reptil está englobado en verde, pero... ¿En qué momento exactamente un dinosaurio (ancestro de las aves) deja de ser reptil? ¿En qué punto un sinápsido (ancestros de los mamíferos) deja de ser reptil? ¿Qué pasa con algunas formas que no están en la línea de "ascendencia" hacia las aves pero tienen plumas como Kulindadromeus? Ilustraciones a color de Dmitry Bogdanov. 

En realidad, en paleontología (y biología) hacemos caso a la sistemática que nos dice que un grupo natural está compuesto por TODOS los descendientes de un mismo ancestro común. Eso hace que los reptiles, en el sentido de la imagen anterior, no sean válidos como grupo natural. Podemos dar opciones para resolverlo y llamar "Reptilia" a todos los miembros desde el último ancestro común entre digamos un cocodrilo y un milerétido... Aún así nos quedamos con que las aves incluidas como reptiles y mandamos al diablo a los sinápsidos y especialmente a los antiguos como reptiles (i.e. animales como Dimetrodon no eran reptiles, algo impensable).

Los reptiles (cuadro rojo), son un grupo que no puede quitarse de encima a las aves (recuadro verde), claros miembros del grupo. Cualquier intento de expulsarlas y "desheredarlas" de la familia incurre en "pecado" filogenético (creación de grupos no naturales). Cladograma tomado de Wikipedia y basado en lo más reciente de filogenia de estos vertebrados.

Esto (dejar de llamar reptil a los sinápsidos y otras formas antiguas como los primeros reptiles conocidos del Carbonífero) es lo que muchos hacen. Perootros, como un servidor, lo consideramos un intento perdido de "salvar" el nombre reptil. Lo más fácil es por tanto, abandonar esa idea de siglo XVIII y darnos cuenta que en realidad, no hay tal cosa como un reptil. Entonces ¿cómo les digo? Simple estimado lector, simple: amniotas.


2. Lo que hace a un "reptil" son los huevos y la piel.

Dado que ya dejamos claro (espero) que "reptil" no significa nada más que problemas y que mejor usaremos el término amniota, entonces ¿qué rayos es un amniota? Bueno, la definición de uno nos lleva a pensar directamente en la palabra "reptil", pues un amniota tiene como características propias (y basales): un cuerpo cubierto por integumento queratinoso seco (escamas) y el desarrollo de un huevo con tres capas extraembrionarias y cáscara dura, el huevo amniota.

Este bebé tortuga tiene lo que debe tener un amniota: el huevo amniota con sus tres capas (corion, amnios y alantoides) y una piel seca y llena de queratina en plaquitas llamadas escamas; dichas escamas desaparecerían secundariamente en muchos grupos. Foto de Richard Mayer.

Aquí nos topamos un un problema: esas cosas (piel y huevos) no se conocen ampliamente en el registro fósil de la época relevante para el origen de los amniotas, el Carbonífero. Gracias a este hecho, podemos especular sobre qué grupos desarrollaron primero estas adaptaciones o bien, podemos tomar miembros conocidos de grupos claramente amniotas (e.g. Synapsida, Diapsida, etc.). Y precisamente es lo que se ha hecho. De tal forma que los amniotas más antiguos conocidos son Protoclepsydrops haplous (un sinápsido) y Paleothyris acadiana (un  diápsido). ¿Resolvimos el misterio de su origen con estos dos bichos de hace 312 millones de años? No.

3. La transición es desconocida en sus detalles (pero tenemos una idea bastante cercana).

Como dije antes, los aminotas más viejos conocidos son un sinápsido (miembro del linaje que condujo a los mamíferos) y un diápsido (miembro del linaje que condujo a las lagartijas y parientes, tortugas, cocodrilos y aves). Pero eso no significa que ellos hayan sido los primeros, sólo que son los que conocemos. Seguro hayan más por descubrir y algún sesgo nos lo impide. Pero entonces ¿de dónde salieron los amniotas?

Reconstrucción de Paleothyris acadiana por Silvana Dettmann.

Bueno, los amniotas surgieron de un grupo muy grande de "anfibios" (otra palabra que evolutivamente no significa un carajo, pero que trataremos en otra ocasión) llamados reptilomorfos (Reptilomorpha). En muchas hipótesis de parentesco, los reptilomorfos son menos derivados que los temnospóndilos, de los que surgieron los anfibios modernos (ranas, salamandras y cecilias), lo que haría de los amniotas (miembros del grupo Reptilomorpha) animales más primitvos que una rana (vaya vueltas que da la vida). En fin, la cosa es que de entre estos reptilomorfos surgieron los amniotas.

Cladograma de Ruta et al. (2003) donde podemos ver que los reptilomorfos (morado) son el grupo más emparentado a los amniotas (rojo) y que de entre todos los reptilomorfos, los diadectomorfos (Diadectomorpha) parecen ser los parientes más cercanos a los "reptiles". Aún con todo eso, tanto los reptilomorfos (incluyendo amniotas) como los lepospóndilos (verde) son considerados "anfibios". Resulta importante notar el cuadro naranja, pues ahí es donde están los anfibios modernos.

Si prestamos especial atención al cladograma pasado, veremos cosas importantes como: 1) Los parientes más cercanos a los amniotas (y por tanto un modelo de cómo debieron ser los ancestros de los mismos) son los diadectomorfos. 2) Estos ancestros amniotas eran tetrápodos no amniotas (anamniotas) que en conjunto son considerados bajo el nombre peyorativo de "anfibios". 3) Estos "anfibios" no guardan relación de parentesco cercana con los anfibios modernos (Lissamphibia).

Diadectes es un género bastante conocido de diadectomorfo, el grupo hermano de los amniotas. Estos anamniotas ("anfibios") no eran primos ni cercanos de los lisanfibios modernos. Ilustración por el Dr. Robert T. Bakker.

Dado lo anterior, los amniotas (erróneamente llamados "reptiles") descienden de "anfibios", pero no de ningún grupo moderno, sino de un antiguo linaje del que sólo sus descendientes escamosos sobrevivirían hasta la actualidad (durante el Triásico tardío, se extinguirían los últimos reptilomorfos no amniotas: los Chroniosuchia).

Así, estimado lector llegamos al fin de este post, espero que el tema te haya llamado la atención. Si tienes dudas no dudes en preguntar. Finalmente, si te gusto el post, haz el favor de compartirlo, quizá alguien lo encuentre interesante también.

viernes, 6 de noviembre de 2015

PALEOFICHA: Gastornis spp.

Nombre común: No tienen, aunque por el sinónimo también se les conoce como "diatrymas".

Especies reconocidas: Al menos cinco, G. parisiensis (especie tipo), G. russeli, G. sarasini, G. gigantea  y G. xichuanensis.

Significado del género: "Ave de Gaston", en honor al médico Gaston Planté, quien descubriera los primeros restos de esta ave (una tibia) en los alrededores de París (de ahí el nombre de la especie tipo).

Género descrito por: Constant Prévost en 1855, pero el nombre fue acuñado un poco después por Edmond Hébert el mismo año.

Grupo taxonómico: Aves neognatas del grupo de las Galloanserae, ubicadas en el orden Anseriformes (donde están los patos) o bien, en un orden propio pero relacionado, el Gastornithiformes.

La Gastornis más clásica del Museo Americano de Historia Natural.

Rango temporal: Del Paleoceno tardío al Eoceno medio (entre 58.7 y 48.6 millones de años).

Encontrado en: Inglaterra, Bélgica, Francia, Alemania, Estados Unidos (Wyoming, Colorado, Nuevo México) y China.

Conocidos a partir de: Una multitud de restos fósiles que incluyen esqueletos fragmentarios en varias etapas del desarrollo e incluso huevos.

Reconstrucción de Gastornis gigantea, la especie más grande conocida de este género. Ilustración de Joaquín Eng Ponce, asesorada por un servidor. Para esta reconstrucción nos basamos en la morfología y coloración de los anseriformes primitivos, con quienes Gastornis presenta la mayor afinidad filogenética.

Curiosidades: Gastornis es uno de los géneros de aves no voladoras más ampliamente distribuidos de todos los tiempos (si no es que el más ampliamente distribuido, sólo vean su distribución), esto se debe a que habitaba zonas selváticas que abundaron en todo el hemisferio norte, pudiendo desplazarse entre continentes caminando por estos bosques y una vez en ellos, generaba especies diferentes. La archifamosa Diatryma, nombre que aún hoy se usa, es un sinónimo de Gastornis y se usa para las Gastornis de este lado del charco (Norteamérica). Muchos suelen confundir a esta pobre ave con las aves del terror con quienes no guarda parentesco estrecho, a veces también se le confunde con las Dromornithidae de Australia con quienes si está emparentada, pero distantemente. Durante su historia temprana se pensaba que era un ave grácil y alta, hoy sabemos que no es así y que era bastante regordeta (puedes hacer clic en este enlace para ver una reconstrucción antigua y caduca). Durante muchísimo tiempo se pensó que esta ave era una terrible cazadora. De hecho, en el documental de la BBC "Paseando con bestias" podemos ver que se le representa como carnívora (pueden ver un clip haciendo clic en este enlace). Gracias a recientes estudios de morfología e isótopos estables, sabemos que en realidad era una vegetariana que probablemente usara su "temible" pico como cascanueces, pues con mucha probabilidad era frugívora. En un tema pasado del blog ahondé en el tema. Finalmente, a muchos les gusta hacer a Gastornis con plumas filamentosas tipo casuario u otras ratitas, pero por su ubicación taxonómica eso es poco probable. Los fósiles que alguna vez se interpretaron como plumas filamentosas de Gastornis son hoy interpretados como material vegetal (clic aquí para ver) y la única pluma fósil que podemos atribuir a esta ave procede del Green River de Wyoming (EUA) y la pueden ver haciendo clic en este enlace.

Descripción original: Hébert, E. (1855). Note sur le tibia du Gastornis parisiensis. C.R. Acad. Sc. Paris 40: 579-582.

PALEOFICHAS ANTERIORES:

1. - Tyrannosaurus rex.
2. - Diplodocus spp.
3. - Lystrosaurus spp.
4. - Protorosaurus speneri.
5. Paraceratherium spp.
6. Cryolophosaurus ellioti.
7. Huehuecanauhtlus tiquichensis.
8. Thectardis avalonensis.
9. Diplomystus spp.
10. Sebecus icaeorhinus.

Literatura consultada:


Mlikovsky, J. (2002). Cenozoic birds of the world Part 1: Europe. Ninox Press. 417pp.

Angst, D., Lécuyer, C., Amiot, R., Buffetaut, E., Fourel, F., Martineau, F., ... & Herrel, A. (2014). Isotopic and anatomical evidence of an herbivorous diet in the Early Tertiary giant bird Gastornis. Implications for the structure of Paleocene terrestrial ecosystems. Naturwissenschaften, 101(4), 313-322.


martes, 3 de noviembre de 2015

PALEOFICHA: Sebecus icaeorhinus

Nombre común: No tiene, pero podemos latinizar su nombre... Sería algo como "sebeco", no... mejor lo dejamos así.

Nombre científico: Sebecus icaeorhinus (se-be-cus / i-ceo-rri-nus).

Significado del nombre: El género es en honor al dios egipcio Sobek, dios del nilo y toda su abundancia. El epíteto específico deriva de εικαίοs (eikaíos), aleatorio y ῥύγχος ‎(rhúnkhos), hocico; por lo que significa "hocico aleatorio", en referencia a lo inusual del mismo.

Descrito por: George Gaylord Simpson en 1937.

Grupo taxonómico: crocodilomorfos notosuquios zifosuqios del grupo Sebecosuchia y de la familia Sebecidae, hoy todos extintos.

Réplica del cráneo reconstruido de Sebecus icaeorhinus (espécimen AMNH 3160) en el Museo Americano de Historia Natural. Foto de Smokeybjb.

Rango temporal: Eoceno temprano (entre hace 55.8 a 48 millones de años). Y posiblemente más si es que las otras especies del género resultan ser sinónimos.

Encontrado en: Argentina (el holotipo procede de Cañadón hondo, Chubut).

Conocido a partir de: Restos craneales, incompletos y casi completos, así como abundante material postcraneal aislado y fragmentario, de los que destacan los de un juvenil casi completo que incluye vértebras, el coracoides izquierdo, un húmero, un radio fragmentario, una ulna completa, partes de la cadera, un par de fémures, una tibia y algunos elementos tarsales y uno carpal. 

Reconstrucción de Sebecus icaeorhinus por Oscar Calva. Asesorada por un servidor. La escala está basada en el cráneo del espécimen tipo adulto y el esqueleto juvenil recientemente descrito por Pol et al. (2012) redimensionado y tomando las proporciones de crocodiliformes similares.

Curiosidades: Sebecus icaeorhinus es uno de los pocos taxones de crocodiliformes nombrados en honor a una deidad crocodiliana. El cráneo de S. icaeorhinus es tan inusual que en un principio se le identificó como un dinosaurio, hasta un estudio más formal donde se creyó que era un cocodrilo raro y luego se supo que no era un cocodrilo verdadero, sino un crocodilomorfo antiguo cuyo linaje era el último sobreviviente de un grupo que otrora reinara el final del Mesozoico. El nombre del grupo donde se anida actualmente Sebecus hace referencia a la anatomía de sus dientes (zifodontos), similares a los de los dimetrodontes y dinosaurios carnívoros extintos; se trata de dientes comprimidos lateralmente y con presencia de dentículos que servían para mejorar la superficie de corte. Este bicho no era acuático,  como podría esperarse de un crocodiliforme, era terrestre y llenó el nicho dejado por los dinosaurios depredadores hasta que los mamíferos los desplazaron completamente en el Mioceno. Se conoce un molde endocraneal de Sebecus que revela un excelente sentido del olfato y una visión y audición bastante buenos. Esto y que los paleontólogos piensen que era un buen corredor lo ponen a uno a temblar un poco de pensar lo que sería de un pobre ser humano en Sudamérica durante el Eoceno.

Descripción original: Simpson, G. G. (1937). New reptiles from the Eocene of South America. American Museum of Natural History. 927: 3pp.

PALEOFICHAS ANTERIORES:

1. - Tyrannosaurus rex.
2. - Diplodocus spp.
3. - Lystrosaurus spp.
4. - Protorosaurus speneri.
5. Paraceratherium spp.
6. Cryolophosaurus ellioti.
7. Huehuecanauhtlus tiquichensis.
8. Thectardis avalonensis.
9. Diplomystus spp.

Literatura consultada:

Colbert, E. H., Simpson, G. G., & Williams, C. S. (1946). Sebecus, representative of a peculiar suborder of fossil Crocodilia from Patagonia. Bulletin of the AMNH; v. 87, article 4.

Pol, D., Leardi, J. M., Lecuona, A., & Krause, M. (2012). Postcranial anatomy of Sebecus icaeorhinus (Crocodyliformes, Sebecidae) from the Eocene of Patagonia. Journal of Vertebrate Paleontology, 32(2), 328-354.

lunes, 2 de noviembre de 2015

F.A.Q. Dakotaraptor steini

Bienvenidos sean todos ustedes de nuevo a una nueva entrada de este, su blog. En esta ocasión hablaré sobre el recién descubierto Dakotaraptor steini, una especie que ha causado sensación en las redes sociales, pero que desgraciadamente ha generado muchos mitos. Y como es costumbre, este F.A.Q. (siglas de "preguntas frecuentes y sus respuestas") explicaré qué hay con este nuevo dinosaurio. Disfruten.

1. ¿Cómo dijiste que se llamaba?
R= Ah, se llama Dakotaraptor steini, se pronuncia "Da-ko-ta-rap-tor, ste-i-ni".

Reconstrucción de Dakotaraptor steini por Emily Willoughby. Esta belleza (el raptor) apareció en el artículo científico de la descripción del nuevo taxón.

2. ¿Y qué significa?
R= El nombre genérico significa "raptor de Dakota" y es que sus restos recién descritos proceden de Dakota del Sur y también se pretende hacer homenaje a la tribu Dakota, que era habitante de la zona donde se encontraron los fósiles de este dinosaurio. Y el nombre de la especie hace referencia al paleontólogo Walter W. Stein. De ahí que el nombre completo signifique algo así como "saqueador de Dakota de Walter W. Stein".

Walter W. Stein, el paleontólogo al que le dedicaron este dinosaurio. Visita su perfil LinkedIn en este enlace.

3. ¿Qué tan viejo es?
R= Del Cretácico tardío terminal, específicamente del Maastrichtiano, el último piso de la era de los dinosaurios. Lo que lo coloca con una edad de hace unos 66 millones de años más unos cuantos miles de años, pues sus restos estaban localizados a escasos 20 cm por debajo del límite estratigráfico entre el Cretácico y el Paleógeno. Por ello, Dakotaraptor era uno de los últimos dinosaurios.

Mapa de la excavación de Dakotaraptor. Tomado de DePalma et al. (2015).

4. ¿Dónde dijiste que se encontró?
R= En Dakota del Sur, Estados Unidos de América. Específicamente en el Condado Harding, en estratos de la Formación geológica Hell Creek.

Mapa de la ubicación de los restos de Dakotaraptor. Tomado de DePalma et al. (2015).

5. ¿Con qué criaturas convivió?
R= Al vivir en la formación Hell Creek, vivió con muchísimas criaturas, hagamos un repaso rápido. Entre los dinosaurios tenemos los géneros: Tyrannosaurus, Ornithomimus, Struthiomimus, Triceratops, Pachycephalosaurus, Torosaurus, Leptoceratops, Ankylosaurus, Edmontonia, Edmontosaurus, Theschelosaurus, entre otros. También vivió con un azdárquido desconocido, al menos tres especies de crocodilomorfo, catorce especies de squamatos (lagartijas y parientes), veinticuatro o más especies de mamíferos, veintiuna o más especies de tortugas, etc. Si quieres saber más de la biota de Hell Creek, haz clic en este enlace.

Algunos dinosaurios que también fueron encontrados en la formación Hell Creek. Ilustraciones de Satoshi Kawasaki.

6. ¿Es cierto que vivió con otros raptores?
R= Parece que si, al menos con uno más, con Acheroraptor temertyorum, descrito en 2013. Y digo parece porque la procedencia estratigráfica no permite saber si coexistieron, sólo que están en la misma formación geológica (Hell Creek). Cabe aclarar que una misma formación geológica no tarda un santiaménen formarse y puede contener lapsos temporales de millones de años, en el caso particular de Hell Creek, la formación tiene al menos 800,000 años de rango temporal. Muchas cosas pueden ocurrir en casi un millón de años.

Acheroraptor temertyorum, descrito en 2013 e ilustrado también por la artista Emily Willoughby.

7. ¿Qué tan grande era?
R= Sus medidas no son concluyentes (por lo fragmentario de los restos) pero pudiera ser que rondara los 5.5 m de longitud (recuerda, los dinosaurios no se miden en alto, sino en largo).

Talla de Dakotaraptor comparada con una persona de talla promedio. A la derecha aparece una silueta con los restos conocidos del dinosaurio nuevo. Note que la pierna que apoya está en mala postura y no se podía estirar tanto en vida. Tomado de DePalma et al. (2015).

8. ¿Es cierto que era más grande que Utahraptor?
R= No. Y es que aunque se aproxima a Utahraptor ostrommaysorum en longitud (el saqueador de Utah medía 7 m aproximadamente de largo), no se le acercaría en masa (peso) y si recordamos que en biología grande= masivo, entonces Utahraptor era más grande por su complexión más pesada. ¿Cuánto exactamente? No lo sabemos, pero no necesitas ser un genio para saber que una garza del tamaño de un pollo pesa mucho menos que el pollo. En este caso, ídem.

Comparación de las garras hipertrofiadas de Utahraptor (izquierda) y Dakotaraptor (derecha) a escala. Foto de Robert DePalma enviada a James Kirkland vía Facebook.

9. ¿Es este el raptor en el que está inspirado Jurassi Park como cientos de fanboys con trombosis cerebral claman?
R= No, todos sabemos que Michael Crichton se inspiró en los dinonicos (Deinonychus antirrhopus) para sus personajes de novela que babeaban veneno. ¿Veremos dakotaraptors en el cine en la secuela de Jurassic World? No creo, pero si aparecen, tendrán síndrome de lagartija fílmica y no representarán al animal de forma realista, quizá hasta le inyecten una dósis alta de Burianina o de Knitghina para hacerlos aún más retro.

9.1. ¿Era un raptor calvo cierto?
R= Me temo que no. Afortunadamente una ulna (hueso más externo del antebrazo) de Dakotaraptor presenta evidencia de "quill knobs", o sea: puntos de inserción de las plumas secundarias (las primarias van en la mano y las terciarias en el brazo). Esto nos grita en la cara dice que este enorme raptor tenía alas. Y según lo que sabemos de la anatomía plumífera de los dinosaurios, esto quiere decir que si, Dakotaraptor era un dinosaurio emplumado.

Hermosa ilustración de Dakotaraptor steini desplumando a su presa, un ornitomimosaurio recién cazado. En esta imagen podemos ver el posible uso de las alas en estos dinosaurios carnívoros según lo propuesto por Fowler et al. (2009). Esta pieza es obra de la talentosa Emily Willoughby.

10. ¿Por qué me debería importar este nuevo raptor?
R= Por varias razones. Primero que nada, es el primer raptor de gran tamaño que se encuentra en la formación Hell Creek, también es el más jóven (geológicamente) conocido en el mundo o sea: el último raptor conocido, antes de que el bólido que impactara en Yucatán eliminara a estos y otros dinosaurios no avianos. También viene a sanar las dudas que algunos estudiosos de la formación tenían, pues desde hace muchos años encontraban huesos raros de gran tamaño que ahora saben, pudieron se de este gran dromeosáurido. Y desde luego, su hallazgo nos hace re-pensar en las interacciones de los dinosaurios de Hell Creek, pues ahora debemos comenzar a preguntarnos ¿suponía competencia con T. rex? ¿Qué comía? ¿era gregario? y todo un sinfín de preguntas científicas.

Así que ahora, les dejaré con algunas imágenes que me han gustado de este dinosaurio. Disfruten.

Las alas de la bestia. Fotografía de Robert DePalma. Usado con permiso.

Acercamiento a la zona de inserción de las plumas. Fotografía de Robert DePalma. Usado con permiso.

Reconstrucción esquelética de Dakotaraptor steini. Fotografía de Robert DePalma. Usado con permiso.

Arte conceptual de Dakotaraptor para el juego Saurian. Ilustración de R. J. Palmer. Note que la silueta pertenece a Robert T. Bakker, uno de los descriptores de la bestia.

Comiéndose a la competencia. Un Dakotaraptor se dispone a comer a un juvenil de Tyrannosaurus. Arte por Zubin Erik Dutta.

Dakotaraptor comparado a Utahraptor. Ilustración por Joschua Knüppe. Si así lo desean, pueden descargar la versión grande haciendo clic aquí.

Un bonito Dakotaraptor corriendo, obra de Paccosaurus Paco Vílchez.

La última y nos vamos... Busto de Dakotaraptor por Ville Sinkkonen‎.


Literatura referida:
Fowler, D. W., Freedman, E. A., & Scannella, J. B. (2009). Predatory functional morphology in raptors: interdigital variation in talon size is related to prey restraint and immobilisation technique. Plos One, 4(11), e7999.
DePalma, R. A., Burnham, D. A., Martin, L. D., Larson, P. L. & Bakker, R. T. (2015). The first giant raptor (Theropoda: Dromaeosauridae) from the Hell Creek Formation. Paleontological Contributions, number 14. KU Paleontological Institute, The University of Kansas. 15pp.

martes, 27 de octubre de 2015

PALEOFICHA: Diplomystus spp.

Nombre común: No tiene. Podemos asignarle el de "paleosardinas".

Especies reconocidas: Al menos diez: Diplomystus dentatus (especie tipo), D. altus, D. birdi, D. dartevellei, D. altisomus, D. dubertreti, D. humilis, D. kokuraensis, D. primotinus, D. vectensis.

Significado del género: "Doble bigote", como podrán notar más adelante, este pez no tiene o tenía bigotes. En cambio, eso del doble mostacho hace referencia a un pez mostachón del sureste asiático, el bágrido (no es broma, si hay una familia llamada Bagridae) Mystus. No tengo idea qué le vio de similar Cope...

Género descrito por: Edward Drinker Cope en 1877.

Grupo taxonómico: Peces óseos avanzados (Teleostei), del orden Clupeiformes que agrupa a las sardinas, anchoas, arenques, alosas y pellonas. Específicamente, de la familia Ellimmichthyidae. O bien, en el orden Ellimmichthyiformes y en la familia Paraclupeidae (véase más adelante).

Diplomystus dentatus, la especie tipo de esta paleosardina. Fotografía de Didier Descouens.

Rango temporal: Del Cretácico temprano (140.2 Ma) hasta el Eoceno temprano (50.3 Ma).

Encontrado en: México, Estados Unidos, Canadá, Guinea, Italia, Japón, Líbano, Marruecos, Palestina y España.

Conocidos a partir de: Multitud de esqueletos completos, parciales e incluso mostrando interacciones con otras especies.

Reconstrucción de la especie tipo de paleosardina, Diplomystus dentatus. Dibujo de Ulises de la Paz Ruiz y coloreado por Joaquín Eng Ponce. En la escala apreciamos un individuo promedio de la especie (de unos 15 cm de longitud total) y en las siluetas, un individuo de talla grande (aproximadamente 48 cm de longitud total) y uno de talla pequeña (8.5 cm aproximadamente), todos adultos.

Curiosidades: La paleosardina (en todas sus variedades de especies) fue asignada originalmente a la familia Clupeidae, que contiene a las actuales sardinas, arenques y alosas. Pasó el tiempo y luego obtuvo familia propia (Ellimmichthyidae) "sólo" 105 años después (en 1982). Algunos paleoictiólogos han sugerido que en realidad, las paleosardinas y sus parientes se agrupan en un orden propio (Ellimmichthyformes) y en la familia Paraclupeidae ("al lado de las sardinas"). Un lío ¿no? En fin, depende de qué criterios se sigan para considerar una u otra opción. Los fósiles de estos pececillos se encuentran entre los más comerciados, vendiéndose en casi cada tienda de la esquina... Bueno, no tanto así, pero si que es fácil obtener tu propio Diplomystus (en este blog no fomentamos el comercio de fósiles, come frutas y verduras). Entre tanta paleosardina algo raro debe haber ¿no? Y si, pues se conocen algunas de estas que han cumplido al pie de la letra el adagio "por la boca muere el pez" y es que literalmente, hay fósiles de paleosardina que murieron al tratar de engullir algo más grande de lo que podían, he aquí un ejemplo. Esto nos lleva a otra revelación, todos estos peces eran carnívoros, algo que no es frecuente entre los sardinomorfos (Clupeiformes), que por lo general se alimentan de plancton, excepto en la familia Chirocentridae. Las paleosardinas eran de agua dulce, algo que también es raro entre los sardinomorfos modernos, con excepción de algunos géneros como Sundasalanx y la familia Pristigasteridae, donde encontramos al análogo más similar a Diplomystus de la modernidad, el género Pellona (jaja, pelona...). La paleosardina se hacía cada vez más fea conforme crecía , su frente crecía poco y el resto de la cara crecía normalmente, lo que producía que tuviera una "cara de rana" que no podía con ella, pobrecilla. Finalmente y para terminar esta sección hay algo digno de mención, las paleosardinas eran más poderosas que los dinosaurios no avianos, pues a diferencia de estos bobos, estos peces sobrevivieron al evento K/Pg que terminó con los animales favoritos de los niños, aunque luego algo pasó en el Eoceno que las eliminó, lástima, jamás sabremos a qué sabe una de estas paleosardinas.

Descripción original: Cope, E. D. (1877). A contribution to the knowledge of the ichthyological fauna of the Green River Shales. Bulletin of the United States Geological and Geographical Survey 3(4):807-819.


PALEOFICHAS ANTERIORES:

1. - Tyrannosaurus rex.
2. - Diplodocus spp.
3. - Lystrosaurus spp.
4. - Protorosaurus speneri.
5. Paraceratherium spp.
6. Cryolophosaurus ellioti.
7. Huehuecanauhtlus tiquichensis.
8. Thectardis avalonensis.

Literatura consultada:

Nelson, J. S. (2006). Fishes of the World. Cuarta edición. John Wiley & Sons. p128.

Grande, L. (1982). A revision of the fossil genus Diplomystus: with comments on the interrelationships of clupeomorph fishes. American Museum novitates; no. 2728.


sábado, 10 de octubre de 2015

¿Lagarticida gigante?

A los paleofans nos encantan los bichos grandes, entre más grande mejor y ¿qué bicho puede ser más fascinante entre todos los lagartijos? No hay otro, el poderoso megalania (Varanus priscus).

Mi primer acercamiento a megalania fue con el documental "Los monstruos que una vez conocimos" (Monsters we met) de la BBC. ¡Y en ese entonces era talla dinosaurio! Y harto malvado.

Pero desgraciadamente (para los amantes de la fantasía), don meg ha sufrido cambios que lo han acercado cada vez más a su antiguo ser mortal y lo han alejado más y más de su posición como lagartija mítica (para gusto de los que amamos la ciencia). Y es que no hace mucho se le redujo la talla, en vez de ser el monstruo de siete metros del que hablé en este blog, hoy sabemos que don meg medía aproximadamente 3.3 metros de largo y un máximo plausible de 4.67 m.

Tamaño de megalania (Varanus priscus). En azul un dragón de Komodo grande (Varanus komodoensis), de unos 2.5 metros (Ciofi, 1999); en rojo la talla máxima de megalania (4.67 m) y en negro, la talla promedio (3.3 m). Datos de Wroe (2002). Dragón de komodo basado en una fotografía de Michael Pitts, megalanias basadas en una fotografía de Romeo Gacad. El humano en la escala (un servidor), mide 1.74 m.

Enanizado y todo, pero ¿era temible depredador no? Pues parece que no era el depredador tope de su ecosistema como nos lo vendieron, habían otros depredadores grandes que quizá le hacían la vida de cuadritos, como Thylacoleo carnifexWonambi naracoortensis (una serpiente de 5 m de largo) o Quinkana fortirostrum (un cocodrilo presuntamente terrestre, de unos 3 m de largo). Y las cosas se ponen más serias, cuando los documentales nos mostraron a los primeros habitantes de Australia interactuando con los megalanias. Pero ¿era esto posible? Un nuevo estudio recientemente publicado* muestra que al menos, los primeros H. sapiens de Australia y los últimos megalanias eran contemporáneos.

Uno de los primeros humanos en Australia es testigo de la lucha de dos gigantes. Arte por Tuomas Koivurinne.

Como siempre la prensa exagera y en las redes sociales se malinforma. Y es que, se anda diciendo que esto demuestra que coexistieron y que es probable que entonces, los humanos hayan sido los responsables de la extinción de estas criaturas. Pero la realidad es menos fílmica y lo "único" que hizo el nuevo descubrimiento fue mostrarnos que los humanos y los varanos gigantes habitaron el mismo lapso, no nos dice nada de si se encontraron cara a cara (pues no hay evidencias para suponerlo digo, yo soy contemporáneo de Scarlett Johansson y hasta habito el mismo continente, pero ni de chiste me la he encontrado cara a cara). E incluso, si los dragones gigantes y los humanos coexistieron, tampoco es garantía de que ellos los hayan extinto. Dejemos ya el burdo movimiento pasivo agresivo donde todos los humanos somos escoria por naturaleza (no hay ciencia que avale esa ridícula idea) y pensemos en las posible causas de la extinción de estas maravillosas bestias sin la cabeza clavada en el suelo. Pues los grandes dragones se han ido, pero nos han legado un misterio, misterio que los paleontólogos luchan por resolver usando la cabeza.


Fuentes:

Ciofi, C. (1999). The Komodo dragon. Scientific American, 280(3), 84-91.

* Price, G. J., Louys, J., Cramb, J., Feng, Y. X., Zhao, J. X., Hocknull, S. A., ... & Joannes-Boyau, R. (2015). Temporal overlap of humans and giant lizards (Varanidae; Squamata) in Pleistocene Australia. Quaternary Science Reviews, 125, 98-105.